Crónica 26-10-19 Osos 21- Arquitectura 25 y 09/11/19 Rivas 15- Osos 18 “Ahora el invierno de nuestro descontento se vuelve verano con este sol de York; y todas las nubes que se encapotaban sobre nuestra casa están sepultadas en el hondo seno del océano”. Ricardo III, William Shakespeare, Acto I, Escena I.
Dice el profesor Julián Casanova que una de las herramientas principales del historiador es la búsqueda de paralelos; es decir, a la hora de comprender y explicar hechos pasados, el historiador debe afanarse en encontrar procesos o fenómenos con características similares a aquellos sobre los que está trabajando (y entre los cuales muchas veces se establecen relaciones de causalidad). Esto le permitirá aportar luz sobre cuestiones tan importantes como los momentos, los protagonistas o las razones que provocan tal o cual acontecimiento determinado. Como la jornada anterior no nos fue posible publicar una crónica a tiempo vamos a hacer precisamente lo que acabamos de explicar. Estudiar y contar como Osos palmó contra Arquitectura para entender porque venció a Atlético-Rivas.
A priori, ambos partidos se presentaban muy complicados para los Osos: dos equipos fuertes, bien armados, con estilos bien distintos, que ocupaban puestos similares en la clasificación. Contra Arquitectura, equipo histórico del rugby madrileño, los Osos salieron hibernando, dormidos en los laureles de anteriores victorias. Poco o nada salió a los de Lucho y Taru, que, sin embargo, estuvieron por delante fugazmente en los primeros minutos del partido gracias a un ensayo de Bauti. Como los golpes de castigo se llaman así por algo, los de azul y blanco pagaron su indisciplina yéndose 6 abajo al descanso. Cuando los del Pardo se quisieron despertar era demasiado tarde; a pesar de haber anotado dos ensayos (Lucas y Walter) en la 2ª parte, la falta de intensidad general y el juego seguro y dinámico de Arquitectura acabaron rubricando la primera derrota de los Osos. Lección aprendida: esta división es una montaña rusa, en la que se montan equipos que saben sufrir, con mucha historia detrás (de esa de anécdotas en Cantarranas y polos de algodón a rayas). Y la "noblesse oblige" a no dejarse ganar por nadie, nunca.
Los Osos se volvieron de Puerta de Hierro con la lección aprendida. No se puede regalar nada. En Rivas se vió buen Rugby. Los locales sabían a lo que jugaban: fuertes delante, buen juego de pie y dominio de las fases estáticas. Los de la camiseta listada sufrieron para parar a Atlético Rivas, y acabaron pagando con 5 golpes de castigo las indisciplinas defensivas. Sin embargo, no recibieron ningún ensayo. Un error de manos de la línea ripense fue aprovechado por Dani para anotar sin oposición. Osos supo sacar partido de esta ventaja y del apoyo de los aficionados desplazados (que con bombo y todo fueron el jugador Nº16), cuando Lucho pudo posar el oval tras una serie larga de fases gracias a un pick and go.
Barbarians espera la próxima jornada y los del Pardo tienen todavía mucho por trabajar y mejorar. Gracias a los Osos, Osas, Oseznos, Oseznas, padres de la escuela y otros amigos del Club que nos llevan en volandas partido a partido 1,2,3 OSOS.